El 26 de febrero hicimos una hermosísima ruta por la finca de Miraflores. Salimos en coche hasta la fuente de San Ambrosio, y andando desde allí bajamos hasta el Emboque del Ventillo, uno de los parajes más impresionante y bonito de nuestra sierra. Allí paramos en un incomparable mirador al valle del río Ventillo para admirar las vistas y reponer un poco las fuerzas, parándonos a comer y beber algo. Subimos a continuación por el valle hasta la fuente de aguas ferruginosas que sirvió para alimentar a los depósitos del antiguo balneario de Miraflores. También visitamos el cortijo que está al lado de las ruinas de este balneario. Dos construcciones de lo más interesantes y curiosas, y muy desconocidas por gran parte de los habitantes de nuestro pueblo, debido quizás a lo recóndito e inaccesible de las mismas. Por último, subimos de nuevo la cuesta que nos lleva a lo alto de las lomas para volver a la fuente de San Ambrosio, donde nos espera Pepe con la agradable sorpresa de una cervecitas bien fresquitas para aliviar nuestra sed, después de haber subido una importante cuesta y con el calorcito que ese día y a esa hora hacía. Sin duda, una de las rutas más bonitas en cuanto a paisaje, de las que hemos hecho dentro de nuestro grupo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario